Se conoce como cloaking a la práctica de distintas técnicas de encubrimiento que hacen que el contenido de una página web sea distinto dependiendo de si accede a él un humano o un robot de búsqueda. De esta forma se pretende conseguir un mejor posicionamiento para ciertas keywords.
La postura desde DinoRANK es clara: nuestra recomendación es que no se haga cloaking para intentar rankear en Google. Sigue leyendo para entender por qué no deberías recurrir a esta técnica de Black Hat SEO.
Cloaking o encubrimiento SEO
Cloaking SEO es la técnica de mostrar contenidos diferentes a los motores de búsqueda de los que se mostrarían a los humanos. Está considerado un método Black Hat SEO ya que las normas de Google establecen que sus crawler o rastreadores deben poder acceder exactamente al mismo contenido que los usuarios.
¿Cómo se hace o hacía el cloaking o encubrimiento?
El cloacking se puede hacer mediante diversas técnicas de encubrimiento. Una de ellas consiste en configurar el servidor de forma que el contenido mostrado cambia dependiendo del navegador desde el que se acceda. De esta manera, se detecta si es Googlebot quien solicita acceso a la página, mostrándole entonces el contenido reservado a buscadores.
Otra técnica se basa en ejecutar un código Javarscript para hacer redireccionamientos del contenido dependiendo de si se trata de un usuario o un buscador. Ejecutar el código Javascript también puede hacer que el contenido cambie según la IP de acceso o usar una Meta Refresh que hace en un tiempo cercano a los 0 segundos se modifique la URL de destino.
Navegando con Javascript desactivado o a través de Web Developer sin aceptar las cookies se puede comprobar si una página web está haciendo cloaking.
Por qué recomendamos no hacer cloaking
Como decíamos más arriba, Google está en contra de la práctica del cloaking por lo que, para nosotros, es un motivo de sobra para no recurrir a esa técnica. Además, actualmente está en bastante desuso ya que los buscadores son cada vez más capaces de detectar estos códigos. El contenido sobreoptimizado de palabras clave también está penalizado y se identifica con facilidad.
De hecho, en Google Search Console se encuentra la funcionalidad Rastrear como Google que sirve precisamente para que el buscador compruebe si estás empleando alguna técnica de encubrimiento en tus sitios web.
Además de que el cloaking es una técnica que no gusta a Google, tampoco es del agrado de los usuarios ya que una de sus consecuencias es una incorrecta indexación de la página web. Te pondremos un ejemplo: tienes una web para promocionar juguetes para adultos pero lo que se muestra a los buscadores es contenido relacionado con juguetes infantiles y es así como posiciona.
El usuario busca juguetes infantiles en Google y aparece la URL de tu págin web. Cuando hace clic, el contenido que se le ofrece es muy distinto por lo que se molesta y cierra la pestaña en ese momento. ¿Cuál es tu beneficio? Piénsalo.
Para finalizar te dejamos un link donde puedes ver la postura oficial de Google respecto al cloaking. ¡No te la juegues!
